




Nuestra Historia

La Obra Salesiana empezó a extenderse a partir del año 1945. Fueron naciendo, una a una, las siguientes presencias: Parroquia Sagrado Corazón de Jesús, en Moca; Aspirantado Salesiano, en Jarabacoa, para la formación de los futuros salesianos; Parroquia María Auxiliadora, Parroquia Sagrado Corazón de Jesús, Parroquia San Pedro Apóstol y Parroquia Cristo Rey, en Santo Domingo; Parroquia Santo Domingo Savio en la Vega, y Parroquia Sagrado Corazón de Jesús, en Mao. Estas parroquias tienen anexas obras educativas y sociales, tales como escuelas y oratorios festivos con canillitas, chiriperos y aprendices; centro juveniles con un cúmulo de actividades formativas y de promoción; dispensarios y proyectos de promoción humana.
Aunque sea de pasada, no podemos dejar de mencionar al Hogar Escuela Santo Domingo Savio en Santo Domingo, en donde durante cincuenta años han encontrado calor humano y el amor de familia miles de niños y jóvenes.
En el 1876 Monseñor Rocco Cocchia había visitado a Don Bosco en Turín y le había pedido que enviase a la República Dominicana algunos sacerdotes para que se hicieran cargo del Seminario.
Entre otras, se conserva una carta enviada por él a Don Bosco, en la que pinta al desnudo la realidad política, económica y educativa de aquella época. Diversas vicisitudes, que no es el caso mencionar ahora, impidieron la llegada de los Salesianos. A partir del año 1878 no volvió a hablarse del tema.
Cincuenta y cuatro años después de la última carta de Monseñor Cocchia a Don Bosco, llegó a la República Dominicana el primer salesiano en la persona del Padre Ricardo Pittini, con el encargo de fundar una Escuela Profesional. Se radicó definitivamente aquí el 6 de febrero de 1934.
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